Cómo limpiar la regadera del baño

Una de las zonas del cuarto de baño cuya limpieza solemos olvidar fácilmente es la regadera o mango de la ducha. Aunque salga agua constantemente y pensemos que está limpia, con el paso del tiempo se va acumulando restos y crecen diferentes hongos y bacterias, que pasan al agua con la que luego nos duchamos. Por esta razón es tan importante limpiar la regadera de la ducha con frecuencia.

Según el tipo de agua de la zona, la alcachofa de la ducha hace de filtro en el que se acumulan restos de minerales y otra suciedad. Es muy fácil que con el tiempo se estropee y que tengamos que cambiarla por una nueva. Algo que se puede evitar si hacemos un correcto mantenimiento.

Hoy vamos a ver cómo limpiar el sarro de la regadera, haciendo una correcta desinfección de esta parte de tus ducha. Sigue los trucos de limpieza para el baño de los profesionales para dejar como nueva tu ducha, quitando manchas negras y dejando el material brillante como el primer día. ¡Es muy sencillo!

¿Por qué limpiar la regadera de la ducha?

¿Cada cuánto suele limpiar la regadera de la ducha? Párate a pensarlo, ¿lo has hecho alguna vez desde que la estrenaste? Pues ni te imaginas la cantidad de suciedad que se acumula justo aquí, en la zona por dónde sale el agua con la que te lavas el cuerpo y la cara.

El cabezal de la ducha es uno de los puntos negros de cualquier cuarto de baño. Acumula mucha suciedad, y es un foco de crecimiento de hongos y bacterias increíble. Solo con la humedad que se acumula aquí mientras no lo estamos usando, en el cabezal de la regadera se multiplican cada día millones de microorganismos que pasan al agua de la ducha después.

Fíjate en el cabezal. Tiene manchas, ¿verdad? La regadera de ducha suele acumular sarro de los minerales del agua que se presenta en color blanco o amarillo, así como manchas negras, verdes o naranjas por las colonias de hongos que crecen sin que te des cuenta.

Toda esta suciedad va directa a tu cuerpo, tu rostro y posiblemente también a tu boca cada vez que te das una ducha. Es el momento de aprender a asearla usando solo productos naturales para limpiar el baño que no dañen los materiales y tampoco sean peligrosos para la salud.

Materiales y productos para limpiar la regadera

El flexo de la ducha de cada baño puede ser totalmente diferente. La gran mayoría está compuesta por un cuerpo metálico o plástico, que a veces se puede desmontar o no.

Para evitar que pierda su brillo y se siga viendo como el primer día, te recomendamos evitar productos de limpieza abrasivos, que sin embargo son muy efectivos para eliminar los microorganismos y sacar la suciedad incrustada.

Haz tus propios remedios naturales de limpieza escogiendo los siguientes productos para limpiar la regadera:

• Limón
• Vinagre blanco
• Sal
• Bicarbonato sódico
• Coca Cola
• Lejía
• Aguja de costura
• Estropajo
• Frasco rociador
• Quitamanchas

Según el tipo de suciedad y el modelo de alcachofa de baño que tengas en casa, vamos a usar unos u otros materiales para hacer una limpieza profunda. ¡Comenzamos con los mejores trucos de cómo limpiar el flexo de la ducha!

Cómo limpiar el cabezal de la ducha paso a paso

Eliminar las manchas con limón

Si sueles limpiar con frecuencia la alcachofa de baño, bastará con eliminar las manchas regularmente devolviéndole el brillo natural a los accesorios de tus sanitarios. Para esto hay un producto natural mucho más efectivo que cualquier abrillantador de metales: el jugo de limón.

Para dejar más brillantes la regadera, los mangos y otros objetos metálicos de tu baño que se van volviendo opacos con la acumulación de cal, basta con cortar un limón por la mitad y restregarlo por toda la superficie. Insiste en las zonas más grandes, ayudándote de un cepillo o esponja mojados en zumo de limón para llegar a las partes más inaccesibles.

Al terminar, solo tienes que enjuagar todo con una bayeta húmeda, retirando los restos de limón. Tu regadera quedará más brillante, desinfectada, y con aroma fresco y natural que te encantará.

Vinagre para desatascar la regadera

En las poblaciones en las que el agua corriente suele tener una gran cantidad de cal y minerales, se suele acumular mucho sarro de color blanquecino. Para quitar el sarro de la regadera hay que hacerlo también con regularidad, evitando que se acumule demasiada cantidad y acabe por estropear tus sanitarios.

Concretamente para remover el sarro que se acumula dentro de la regadera de baño cuando esta no se puede quitar, vamos a usar vinagre dejándola en remojo.

Uno de los trucos con vinagre de limpieza que mejor funciona en el baño es eliminar los minerales depositados. Como ya vimos para limpiar el sarro del inodoro, el vinagre disuelve los minerales de manera natural, sin dañar el resto de materiales.

Solo tienes que cubrir la regadera con una bolsa de plástico y vinagre en su interior, de manera que quede totalmente sumergida, dejándolo actuar 3 horas.

Pasado este tiempo, retira la bolsa y frota con un cepillo o estropajo suave. El sarro saldrá fácilmente y la ducha estará totalmente limpia y desatascada.

Desatascar la regadera de la ducha con una aguja

Para limpiar el cabezal de ducha más profundamente cuando este se puede sacar, hay otro truco que te tomará algo más de tiempo pero te será altamente eficaz. Vamos a usar una aguja o alfiler de costura, para ir desatascando uno por uno todos los agujeritos en los que se han acumulado restos de minerales y tierra del agua.

Comienza retirando la regadera, desenroscándola de su sitio. Sacúdela sobre el lavabo del baño al revés, para que salgan los restos que hay dentro. Es el momento de echar agua desde los agujeros hacia dentro, para que la presión haga salir los minerales que están sueltos. Sacude y asegúrate de que no sale nada más.

Para terminar, usar la aguja y métela desde fuera hacia dentro de lo agujeritos del cabezal de la ducha. El sarro caerá en el interior, y podrás volver a sacudir para que salga.

Si quieres que la regadera de ducha quede totalmente limpia, déjala en remojo dentro de un barreño con vinagre blanco durante unas horas o toda la noche. Ennjuaga bien antes de colocarlo, y verás lo limpio que ha quedado.

Eliminar el sarro con sal y limón

¿Hay algún trozo de sarro que se te resiste y no consigues eliminar del todo? Cuando demoras demasiado la limpieza de la alcachofa de la ducha, a veces el sarro se endurece tanto que es prácticamente imposible de eliminarlo. Uno de los mejores remedios caseros para el sarro del baño implica usar limón y sal para frotar sin dañar la superficie.

Los metales de los accesorios del baño son muy delicados, y se pueden arañar con facilidad. Evita usar cepillos y estropajos demasiado duros que rayan la superficie, y en lugar de ello saca el sarro con medio limón empapado en sal.

Con esta mezcla solo tendrás que frotar para ver cómo la suciedad van saliendo. Al terminar solo tendrás que enjuagar con agua, dejando la ducha brillante y los metales con el aspecto que tenían el primer día. ¡Como nuevos!

Sacar brillo con bicarbonato de sodio

Al igual que el vinagre, el bicarbonato de sodio es uno de los productos de limpieza naturales más útiles en el hogar. La gran mayoría de trucos para limpiar los baños incluye el bicarbonato sódico entre tus ingredientes, y no podría faltar a la hora de dejar reluciente la regadera de la ducha.

El bicarbonato elimina las manchas, desinfecta y además saca brillo cuando los metales de la ducha están ligeramente corroidos. Mezclado con agua es bastante eficaz, pero si además lo pones con vinagre blanco, crearás un limpiador efervescente mucho más potente.

Mezcla vinagre blanco con un par de cucharadas de bicarbonato, poniendo la regadera de la ducha en su interior. Puedes poner la mezcla en una bolsa de plástico y poner la regadera dentro si no es extraible. Deja que actúe entre 30 minutos y 1 hora, y harás magia con este limpiador.

Si no, puedes darle con un cepillo de dientes viejo. Al terminar, enjuaga con agua y pasa un paño seco de algodón para frotar ligeramente y sacar brillo. El metal quedará como recién puesto.

¿Y tú, conoces otros trucos para limpiar el baño con bicarbonato?

Coca Cola para limpiar la regadera de la ducha

Otro truco que me encanta para limpiar el baño con productos naturales es usar las burbujas de los refrescos. En este caso nos decantaremos por la Coca Cola, ya que a diferencia de otras sodas, el ácido fosfórico que contiene es capaz de arrancar el sarro del baño.

Para limpiar la ducha del baño vamos a hacer lo mismo que con el bicarbonato. Introduce la regadera en un barreño con Cocacola, y deja actuar 1 hora. Llena una bolsa con este refresco y átala alrededor del cabezal de la ducha si este no se puede extraer.

La gran mayoría de alcachofas de la ducha se pueden extraer. Si no sabes como quitar una llave de regadera, puedes consultar con un experto para que te indique la forma más sencilla sin forzarla para no romperla.

La Cocacola es también muy efectiva para desatascar el lavabo o el váter, y para quitar las manchas de jabón en el baño. Estos y otros muchos trucos con refresco son perfectos cuando no sabes como limpiar una ducha muy sucia.

Lejía para desinfectar la regadera

Después de limpiar ducha con vinagre y bicarbonato, llega el momento de desinfectarla. Cuando ya tengo claro como puedo quitar el sarro del baño, el resto de manchas negras o de color anaranjado se deben eliminar con productos específicos para matar los microorganismos.

Haz una mezcla de agua caliente con unas gotitas de lejía o cloro para limpiar baños. Introduce la regadera de la ducha, y dejar actuar unos minutos para matar hongos y bacterias que crecen alrededor de los orificios de salida del agua. También puedes usar quitamanchas.

Al terminar, solo tendrás que frotar esta zona con un estropajo y jabón, o ayudarte con un cepillo si no consigues llegar a todos los rincones. Para limpiar regadera en profundidad, es recomendable que repitas este proceso de desinfección cada 2 semanas, asegurándote de que está totalmente libre de gérmenes.

Limpiador de vinagre para usar a diario

Como último consejo para limpiar la regadera de la ducha a diario, te propongo tener siempre a mano un limpiador que podrás rociar siempre después de ducharte. De esta forma evitarás que el sarro se acumule y que crezcan hongos y bacterias, provocando malos olores y manchas en tus sanitarios.

Haz un limpiador para la ducha mezclando una parte de vinagre por cada 3 partes de agua, y un chorrito de jabón para el baño. Pon este limpiador en un frasco pulverizador, para rociar la regadera al terminar de ducharte.

Deja actuar hasta la siguiente ducha, enjuagando bien la alcachofa antes de mojarte el cuerpo. De esta forma siempre tendrás la regadera limpia y desinfectada, con productos naturales que no resultan peligrosos para tu salud.

Repite el procedimiento para limpiar la regadera de la ducha cada semana, sin apenas esfuerzo gracias al mantenimiento diario que te permitirá hacer tu limpiador de vinagre. ¡No te costará nada!

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